Nuevo acto de los señores de la guerra

Juan Carlos Rois
Tortuga.

Estamos de enhorabuena. Y sobre todo están de enhorabuena los pacifistas y antimilitaristas de Castilla la Mancha y, particularmente los de Toledo (¿queda alguno?).

Y lo están porque en el mes de noviembre se celebrarán las terceras jornadas del Foro ejército-empresas, ahora llamado «FORO 2E+I fuerza 35»”, una reunión de capitostes del ejército, la industria militar y, cómo no, las universidades.
Así aparece en la página web del susodicho foro, que nos dice en su página de presentación que «Este foro supone un diálogo abierto y directo entre Ejército, universidad e industria, fuera del ámbito comercial y contractual, para fomentar el intercambio de opiniones sobre cómo afrontar los retos del futuro con el horizonte 2035».

Y es que estas tres patas de la endiablada banqueta del complejo militar industrial (no son las únicas patas) pretende mantener su situación de abundancia al menos de aquí al 2035, lo que, si les salen bien las cuentas (y, a juzgar por el seguidismo de nuestros políticos y gonernantes a la idea de rearme continuo, parece que sí) supondrá una deuda militar considerable a sumar a la que ya arrastramos por compra de armas para el ejército español, así como una mayor inestabilidad mundial (porque, dicho sea de paso, la mayoría de las armas que los señores de la guerra fabrican con el sello «made in Spain» se destinan a exportarlas en un orbe mundial donde no se pone el sol).

Una deuda, dicho sea de paso, tan ilegítima (no nos la han consultado, nos perjudica y se realiza en beneficio de este entramado de intereses militar-industrial y político) como injusta y monumental (porque nos empobrece y se hace en detrimento de las necesidades sociales), y una inestabilidad mundial por venta de armas que es el sustrato ideal y que promueve el complejo militar industrial para hacer de la oportunidad (prefabricada) negocio.

El cartel del susodicho foro me parece un tanto incongruente. Dice que este tinglado se monta para fundar un futuro seguro, cosa que veo imposible si nos trufamos de armas e inundamos al resto del planeta de más armas de las que ya soporta, pero es que en la cabeza de los señores de la guerra la seguridad se equipara con la seguridad de sus bancos y negocios y en la perpetuación de un sistema global de violencia directa, estructural, cultural y sinérgica; no con la seguridad humana a la que las armas contribuyen a fragilizar.

Pero vayamos al encuentro en el que tan inestimable legitimación ofrece la universidad al militarismo.

El sarao se realizará en la Academia de infantería de Toledo, lugar de inevitables evocaciones, los días 4 y 5 de noviembre (san Carlos Borromeo y San Nicandro de Mira por lo que hace al primero y santa Bertila y San Guido por lo que hace al segundo patrocinios en todo caso poco rimbombantes).

Este III foro tiene como objetivos, siguiendo la publicidad institucional del mismo:
«1. Mantener un contacto permanente entre el Ejército de Tierra, las universidades y centros de investigación y la industria que favorezca el intercambio de ideas.
2. Exponer las necesidades a corto, medio y largo plazo del Ejército y las principales conclusiones y enseñanzas de la experimentación en BRIEX 2035.
3. Facilitar que las empresas del sector de la Defensa puedan conocer las necesidades del Ejército, con el horizonte en el año 2035.
4. Presentar a los asistentes los proyectos de experimentación que se están llevando a cabo en la actualidad por el Ejército.
5. Fomentar el conocimiento de la Fundación Museo del Ejército como una entidad privada sin ánimo de lucro, que tiene como finalidad principal apoyar la promoción de la cultura y conciencia de Defensa.»

Es decir, como dice el canon, estos cinco mandamientos se encierran en dos: legitimar a la industria militar y aferrar la alianza de intereses de ésta con la voracidad de nuestro militarismo en período de rearme.

Para la colaboración con este foro existen diversas modalidades de patrocinio, que van desde el llamado patrocinio Platino (18.000 eurazos) al de «bronce» (con 2000 eurillos), más dos fórmulas de mecenazgo de entre 10.000 euros a 12.000, a lo que se acompaña con el pago de 600 euros para los que quieran participar al completo o 300 si sólo a una jornada (se exceptúan miembros de las FAS, que irán por la patilla), lo que quiere decir que, además, el encuentro tiene su miaja de negocio autónomo también.

De momento no he encontrado información acerca del posible apoyo institucional (fuera del Ministerio de Defensa, que va de suyo) al evento, pero nada me extrañaría que, junto a los señores de la guerra, haya un cierto grado de participación de instituciones civiles, ayuntamiento, Comunidad Autónoma y otras fuerzas vivas, incluidas las cacareadas universidades castellano manchegas o aledañas.
Cuando en Madrid los señores de la guerra se empecinaron en celebrar sus ferias armamentistas con periodicidad, nació Desarma Madrid para luchar contra este desmán que, por cierto, gozaba del colaboracionismo rancio de la Comunidad Autónoma y el Ayuntamiento capitalino.

Tal vez el foro, en definitiva un acto más de propaganda e interacción de la industria militar, debería contar también con la participación desobediente de los antimilitaristas y pacifistas de la zona. No están las ciudades ni los ciudadanos para animar el negocio militar y sus eventos.

¿Quizás un motivo este del foro de los señores de la guerra para reunir fuerzas pacifistas y antimilitaristas dormidas de Toledo?