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El director del Instituto de Neurociencias de Alacant dice que el hombre es genéticamente diez veces más proclive a la violencia que la mujer

Lunes.20 de marzo de 2006 2097 visitas - 1 comentario(s)
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Diario Información de Alacant

JORNADAS CIENTÍFICAS

Belmonte dice que algunos hombres agreden por predisposición genética

El director del Instituto de Neurociencias afirma que los jueces se van a enfrentar a la disyuntiva de decidir si alguien es culpable sabiendo que su conducta ha sido prácticamente inevitable.

CLARA R. FORNER

De izquierda a derecha, Roberto Gallego, Carlos Botella, Carlos Leiva y Carlos Belmonte antes de la mesa redonda

El director del Instituto de Neurociencias, Carlos Belmonte, afirmó ayer que el cerebro de algunas personas es más proclive a las agresiones y que el conocimiento del cerebro revelará que algunos hombres prácticamente no pueden evitar agredir a las mujeres.

De izquierda a derecha, Roberto Gallego, Carlos Botella, Carlos Leiva y Carlos Belmonte antes de la mesa redonda

Belmonte hizo estas aseveraciones en la mesa redonda titulada «La manipulación del cerebro: cuestiones éticas», con la que se cerró ayer en el Club INFORMACION la Semana del Cerebro y en la que intervino el vicerrector de Investigación de la Universidad Miguel Hernández, Salvador Viniegra.

El director del Instituto de Neurociencias señaló que el mejor funcionamiento del cerebro puede crear problemas éticos en el futuro. Como ejemplo citó la violencia de género «que es un problema extremadamente grave en nuestra sociedad» y señaló que por cada mujer violenta hay diez hombres. «Eso no es casual. el cerebro masculino tiene algunos aspectos en los circuitos vinculados a la agresividad que le hacen más proclive a determinadas agresiones». En consecuencia, añadió, «nuestros jueces se van a enfrentar en un tiempo relativamente corto con la disyuntiva de que la exploración del cerebro va a llegar a decir que determinadas conductas han sido prácticamente inevitables por parte de los sujetos y eso nos va a obligar a reflexionar sobre cómo actuamos con respecto a esas conductas». Sugirió que en esos casos en vez de castigarlo habría que separarlo de la sociedad.

El presidente de la Sociedad Española de Neurociencias, Roberto Gallego, planteó otro dilema ético que pueden plantear los avances científicos, ya que va a haber técnicas espectaculares para enfermedades del cerebro pero «tremendamente caras». «¿La sociedad está lista para el tremendo coste que van a suponer estas técnicas científicas para tratar a todo el mundo?», cuestionó.

Asimismo, se preguntó si los científicos pueden investigar todo y si «la neurociencia va a crear problemas graves cuando sepamos cómo controlar la conducta». Sin embargo, restó gravedad a esta posibilidad al señalar que actualmente otros agentes manipulan la mente «como por ejemplo los medios de comunicación».

Falsas expectativas

Gallego quiso hacer autocrítica al advertir de las falsas expectativas que pueden crear los investigadores a algunos enfermos cuando anuncian avances científicos que no se traducirán en tratamientos generalizados hasta décadas después.

El jefe del servicio de Neurología del Hospital General Universitario de Alicante, Carlos Leiva, destacó que «estamos asistiendo a un incremento espectacular de enfermedades relacionadas con la edad» como el Alzheimer, que crean un «problema muy importante de tipo sanitario y social» pero que son muy difíciles de tratar debido a que el sistema nervioso «es muy inaccesible». Por contra, también «estamos asistiendo a un gran progreso en las terapias».

Por su parte, Carlos Botella, jefe del servicio de Neurocirugía del citado centro hospitalario, hizo una retrospectiva de la joven historia de su especialidad en España ya que el cerebro es un órgano «muy frágil y cualquier maniobra que se haga dentro de él puede provocar una lesión». Pese a ello, aseguró que las técnicas que hoy se utilizan «son muy seguras, eficaces y con muy poca carga para el paciente», aunque sigue habiendo un temor entre la población porque «estamos pagando los platos rotos de una historia relativamente reciente».

Añadió que los tratamientos mediante neurocirugía se están aplicando cada vez a enfermedades más diversas, incluso a patologías como la depresión, la neurosis obsesivo-compulsiva o las migrañas incapacitantes.


¿Quién decide si un niño debe de ser sordo o no?

Un dilema que ya se está planteando y que tiene difícil solución pasa por decidir si un niño que nace sordo debe seguir siéndolo o no. Los expertos explicaron que actualmente existen unos implantes cerebrales para corregir la sordera pero sólo pueden colocarse en la infancia. El problema, explicaron, radica en que una asociación «defiende al sordo como una cultura individual y creen que el implante es una agresión». En ese caso, el doctor Botella se preguntó: «¿Quién es el que decide qué es normal?». A este respecto, Leiva apuntó que «algunas parejas de sordos buscan que su hijo sea sordo» y que este tipo de conflictos, cuando surjen, debe resolverlos un juez.

  • La verdad es que, cuanto menos es gracioso. Bueno, en serio, es bastante preocupante. No dudo en los estudios hechos que avalen esta tesis. Ahora bien, en España las mujeres practican muchas mas muertes que los hombres, con el aborto, casi 1.000.000 desde 1985. En la Comunidad Valenciana cada dia mueren por aborto una media de 25 personas. Creo que el Instituto de Neurociencias deberia tener criterios mas equitativos en sus estudios. Lo que pasa es que claro, como en este pais siempre se lincha a los mismos, pues ale, a decir que somos monstruos depredadores de mujeres.
    Lo grave es que cualquier dia el director de la DGT dira lo mismo pero en este caso con los coches.
    Lamentable.