Desobediencia civil en Vigo: el PP y BNG de la mano de las constructoras

El Mundo

LA SESIÓN TUVO QUE SER SUSPENDIDA

Vecinos de Vigo irrumpen en masa en el Pleno del Ayuntamiento para protestar contra el Plan de Urbanismo

VIGO.- Decenas de personas han entrado en avalancha en el salón de plenos de Vigo durante la sesión en la que se debatía la aprobación del Plan General de Ordenación Municipal de la ciudad que supone una remodelación urbanística de numerosas parroquias y de zonas céntricas de la ciudad.

El pleno, que comenzó a las nueve de la mañana, se vio interrumpido a los veinte minutos de comenzar por los vecinos que entraron en el salón de plenos acusando de "farsante, demagogo y vendido a los intereses de las constructoras" al concejal del PP responsable de Urbanismo que en aquellos momentos estaba haciendo una exposición en defensa del documento.

Los vecinos alegaron que siendo una sesión pública no se podía vetar la entrada de todo el pueblo al salón de plenos y, al haber un escaso espacio, ironizaban con que se celebrase en el Estadio de Balaídos porque consideran que no había información suficiente sobre "algo que afecta a nuestras casas".

Ante la crispación, la alcaldesa, Corina Porro, pidió un receso de cinco minutos y abandono el salón junto a sus concejales y los representantes del BNG, que también apoyan el plan. En la sala se quedaron tan sólo los concejales del PSdeG que defienden la paralización del documento.

Los manifestantes provocaron daños materiales en las dependencias del edificio, donde rompieron cristales, una barandilla y ahora colapsan el salón plenario.

La Policía nacional ha cortado las entradas al edificio del Ayuntamiento y no permite la entrada a las dependencias municipales, donde todavía cientos de personas ocupan el salón plenario.

La Voz de Galicia

Vecinos de Vigo se encierran en la alcaldía en protesta por el Plan General

La alcaldesa Corina Porro ordenó su desalojo tras ofrecerles una reunión con un concejal
Rechazan la construcción de un vial que cruza la periferia y acudirán a los tribunales

* El documento sale hoy adelante con los votos del PP y del BNG

CAPOTILLO
(Diego Pérez | vigo)
Una treintena de vecinos tomaron ayer la alcaldía de Vigo para protestar por la previsible aprobación del Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) en el pleno extraordinario que se celebrará hoy. Su estancia en el Concello duró menos de dos horas, el tiempo que tardó la policía local en desalojarlos por orden de Corina Porro. La alcaldesa, por medio de su jefa de gabinete, les había ofrecido una entrevista por la tarde con el concejal de Urbanismo, José Manuel Figueroa. Sin embargo, Carlos Cid, portavoz del grupo, se negó, aduciendo que ya no era el momento de más entrevistas para que les diesen largas. «Lo que queremos es mostrar nuestro rechazo al plan con un encierro pacífico», apuntó.

Desde la alcaldía se les advirtió de que no podían pasar la noche en las dependencias municipales por motivos de seguridad y que serían desalojados. Los agentes del 092 ejecutaron la orden, arrastrando a algunos vecinos, pero sin que se produjesen conatos de violencia.

Motivo

Las protestas tienen su raíz en el proyecto de la Ronda, un gran vial de 22 kilómetros que atravesará la ciudad y enlazará buena parte de las parroquias del extrarradio. En los últimos meses, a través de una coordinadora, los afectados han tratado sin éxito de que se descarte una actuación que el gobierno municipal considera estratégica para el desarrollo del municipio, aunque se lleve trescientas casas por delante.

El colectivo presentó un estudio de sostenibilidad del PGOM elaborado por profesores de la Universidade de Vigo con el que trataron de demostrar los efectos negativos que tendrán los planes urbanísticos y la propia carretera. Alegan que destruirá la zona rural de Vigo, ya que a lo largo de su recorrido están previstas grandes urbanizaciones, y que afecta a enclaves naturales.

Las protestas volverán al pleno extraordinario de hoy, que se presenta movido. Anuncian que denunciarán el asunto en los tribunales porque, a su juicio, se vulneran sus derechos.